lunes, 13 de septiembre de 2010

EL PEELING

El Peeling, también llamado quimio – exfoliación , quimiocirugía o dermopeeling, consiste en producir la remoción de las capas superficiales de la piel logrando un recambio celular acelerado. Es un procedimiento que permite eliminar distintas capas de la epidermis para regenerar la piel. Esto hace que la misma se vea más joven, sana y reluciente. Está indicado para casos de acné, arrugas, melasmas o enfermedades como la dermatitis seborreica. Una solución, nada complicada, que deja la piel como nueva.
La selección del tipo de peeling y aplicación correcta del mismo serán la base fundamental para obtener buenos resultados. El tipo de peeling a usar (profundo, medio, superficial y muy superficial) dependerá del tipo de lesión a tratar, tipo de piel y de la zona afectada.
Peeling superficial: cierra los poros, atenúa las cicatrices originadas por el acné y las arrugas finas. Aporta uniformidad al tono de la piel y un aspecto más juvenil y saludable. En este caso se ayuda a controlar el acné, las foliculitis y las secreciones sebáceas, además deja la piel en mejores condiciones para que se pueda recibir cualquier tipo de tratamiento dermatológico.
- Peeling medio: indicado en el caso de envejecimiento solar o tóxico, ya que actúa sobre las arrugas finas y de profundidad media, y para controlar las manchas actínicas. También se emplea previamente o como complemento de muchos tratamientos médicos (microdenervación, lifting o rellenos).
- Peeling profundo: actúa sobre las arrugas superficiales, medias y profundas, elimina manchas actínicas y solares, y queratosis. Asimismo, produce la retracción de la piel, lo que mejora de forma notable los problemas de flacidez.
Hay que saber que el peeling está contraindicado para personas que tengan cualquier enfermedad viral, como herpes o infecciones; ya que su aplicación puede tener efectos colaterales como la foto sensibilidad (una sensibilidad mayor a la exposición al sol), reacciones irritativas a la piel, resequedad. Hasta ahora no ha tenido efectos colaterales severos, pero en caso de que el tratamiento se lleve a cabo por manos inexpertas, sí pueden provocar daños, porque se puede quemar la piel.

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